El camino hacia el objetivo de cero emisiones netas es complejo y se enfrenta al mayor desafío de la humanidad. La mayor parte de la población mundial ya siente los efectos del cambio climático. La tecnología ofrece herramientas esenciales e innovadoras para gestionar recursos, acelerar la descarbonización y facilitar la transición energética hacia un futuro sostenible.
Observación de la Tierra para la conservación de la naturaleza
La observación de la Tierra (EO) recopila información sobre la superficie, aguas y atmósfera del planeta mediante teledetección. Estos datos, analizados para monitorear y evaluar entornos naturales y artificiales, podrían generar beneficios económicos de 3,8 billones de dólares para 2030 y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en más de 2 gigatoneladas al año. Yana Gevorgyan, directora de la Secretaría del Grupo de Observaciones de la Tierra, lidera un proyecto para mapear ecosistemas globales con un detalle sin precedentes, comenzando por California. Este recurso permitirá tomar medidas efectivas para la conservación de la naturaleza.
IA para la descarbonización
La inteligencia artificial (IA) está revolucionando todo, también la lucha contra el calentamiento global. Diferentes empresas destacan que la IA generativa puede crear sustancias químicas específicas que capturan el carbono de manera eficiente y lo liberan en una forma reutilizable, eliminando la necesidad de almacenamiento y contribuyendo a la creación de productos sostenibles.
Aviación para energía verde
Las turbinas eólicas, aunque sean eficaces, están limitadas por las restricciones del transporte. Una solución innovadora propone usar el avión más grande del mundo para transportar aspas de turbinas gigantes a los lugares donde se necesiten. Esto permitiría duplicar la capacidad de las turbinas eólicas terrestres y triplicar la superficie global donde la energía eólica es viable. Se planea establecer una flota global que entregará piezas dentro de un radio de 2.000 km, aumentando significativamente la implementación de turbinas eólicas grandes y reduciendo las emisiones de carbono.
En resumen, la observación de la Tierra, la inteligencia artificial y la aviación están ofreciendo soluciones innovadoras y efectivas para abordar la crisis climática, intentando que el poder de la tecnología contribuya más en la lucha por un futuro sostenible.