El CSIC forma parte de un consorcio europeo liderado por la Universidad de Oulun (Finlandia) para caracterizar las materias primas críticas en Europa. Se trata del proyecto Agemera, a través del cual se mapearán seis países de la Unión Europea y Zambia, en África.
El objetivo es poner en valor la importancia de las materias primas críticas en un contexto en el que se está impulsando la economía circular y la transición verde. Los materiales estudiados son el litio, el magnesio, el cobalto o el platino, de los que Europa es dependiente del suministro de otros países.
El proyecto tendrá duración de 3 años, contará con la tecnología más avanzada para realizar las tareas de mapeo y con una parte de didáctica y concienciación ciudadana de los países participantes.